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Audio Stop 13

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A French window with its sill lined with flowerpots opens into a view of boats floating in a body of water in this loosely painted, vibrantly colored, stylized, vertical painting. The doors open inward, and they are painted with coral orange and cranberry red. The wall behind the door to the left is peacock blue and the wall to our right is fuchsia pink, and those colors are reflected in the opposite windows of the doors. Three flowerpots in crimson red, marmalade orange, or royal blue sit on the windowsill in front of us. Foliage in the pots is painted with short strokes of cardinal red and turquoise blue. Over the window, a two-paned transom window pierces a forest-green wall. The view through the panes has a band of salmon pink across the top and dabs of celery green and banana yellow below. The dabs and dashes of pine and lime green continue down the sides of the window and across the sill, suggesting vines growing up around the opening. A band of ultramarine blue beyond the flowerpots could be a balcony. Several rust-orange masts of ships with hulls painted with swipes of indigo blue, flamingo pink, forest green, and marigold orange float in the water beyond. The water is painted with parallel strokes in pale pink and butter yellow. The sky above is painted with thick, wavy lines of steel blue, periwinkle purple, and seafoam green. The artist signed the work in red paint in the lower right, “Henri Matisse.”

Henri Matisse

Open Window, Collioure, 1905

East Building, Mezzanine — Gallery 217-B

En la actualidad, la obra Ventana abierta, Collioure de Henri Matisse puede parecer agradable y lírica, pero originalmente sus pinceladas gruesas y colores intensos se juzgaron violentos. Esta obra pequeña pero explosiva, icono del modernismo temprano, se considera una de las pinturas más importantes de la escuela fauvista, un grupo de artistas que se centraron en liberar el color y la textura de las estrictas representaciones del aspecto natural. Ventana abierta, Collioure representa el inicio de este nuevo enfoque en el arte de Matisse.

Transcripción de audio

HARRY COOPER:

Una de las declaraciones que Matisse hizo respecto del color fue: “Cuando aplico un verde, no es pasto. Cuando uso azul, no es el cielo”.

NARRATOR:

Y aquí puede verse lo que quería decir: olas rosas, mástiles naranjas y un cielo multicolor.

El curador y director de arte moderno, Harry Cooper.

HARRY COOPER:

Esta pequeña pintura realmente tuvo un efecto muy grande. Estamos acostumbrados a verla en carteles, en calendarios. Sin embargo, en aquel entonces, incluso para los espectadores que estaban acostumbrados al impresionismo, esto iba mucho más allá.

Ese bote central está representado solo con cuatro pinceladas gruesas de pintura: una de un tono rosa blanquecino; otra, azul; otra, un poco más salmón; y una verde oscuro. Hay tanta inventiva detrás de lo que Matisse pudo haber visto aquí.

NARRATOR:

La obra supuso un hito en la carrera de Matisse. La expuso en el Salón de Otoño de 1905, donde un crítico lo desestimó —a él y a otros pintores— calificándolos de “fauves” o “bestias salvajes” y a sus obras de “orgía de tonos puros”. Sin embargo, el nombre quedó y Matisse lideró este grupo flexible de aliados en lo que se convertiría en el primer movimiento francés de vanguardia de principios del siglo XX.

HARRY COOPER:

La parte central es agradable y dinámica, pero es en lo que ocurre a su alrededor, en la enmarcación —las paredes, las ventanas— donde se aleja de la pincelada impresionista, los pequeños toques de pintura aquí y allí, para crear ese ritmo lírico. Y comienza a trabajar con grandes áreas de color colocándolas las unas junto a las otras. Creo que allí es donde vemos al Matisse del futuro.

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