Audio Stop 6
George Bellows
New York, 1911
East Building, Ground Level — Gallery 106-B
Nueva York, completada en febrero de 1911, es una pintura ambiciosa y de gran tamaño en la que George Bellows capturó la esencia de la vida moderna en la Ciudad de Nueva York. Bellows no quiso representar un lugar específico ni identificable de la ciudad. En cambio, se inspiró en varios de sus bulliciosos distritos comerciales para crear una amalgama, una imagen imposiblemente repleta de gente, que transmitiera de la mejor manera posible el ritmo frenético de Nueva York.
Transcripción de audio
NARRATOR:
El año es 1911; el lugar, la ciudad de Nueva York, epicentro de la modernidad. Y George Bellows se atrevió a abordarla en esta dinámica pintura.
CHARLES BROCK:
Lo que más me gusta de ella es su ambición desenfrenada. Tenemos a un artista muy joven, dispuesto a intentar cualquier cosa.
NARRATOR:
Charles Brock.
CHARLES BROCK:
Dispuesto a intentar algo tan audaz como representar la totalidad de la ciudad de Nueva York en un lienzo.
NARRATOR:
Aquí Bellows imaginó el distrito comercial de la ciudad, en Madison y la 23, en su momento más frenético.
CHARLES BROCK:
Al fondo, a lo lejos, hay un tren elevado y los propios rascacielos. Y vemos este popurrí de tránsito con carretas tiradas por caballos que entran en conflicto con los automóviles y los peatones. Es un tipo de pintura que, para los espectadores contemporáneos, era tan confusa como el tema en sí.
NARRATOR:
Resulta incluso difícil saber a dónde mirar: el tranvía del extremo izquierdo cargando pasajeros, los carteles de las tiendas, los peatones anónimos agolpados en las calles. En un mar de grises y verdes, Bellows identifica unos pocos detalles en rojo. Los críticos consideraron que la obra era desorganizada y difícil de leer.
CHARLES BROCK:
Sin embargo, todos se sintieron atraídos por la pintura, por su vitalidad, por la forma novedosa en la que Bellows intentaba representar la ciudad. Y uno de los escritores, tras criticar la pintura, dijo: “Algún día, en un futuro lejano, se la considerará, sin duda, la mejor descripción de la escena neoyorquina informal realizada por los reporteros del presente”.